Aprovechando que el sorteo de la Uefa ha deparado un emparejamiento entre mi Atleti y el Bolton Wanderers inglés, me gustaría aprovechar un breve comentario para comentar los equipos británicos que han pasado por el Calderón. Mi primera experiencia con el fútbol de las islas es una vaga imagen que se remonta al año 1985 cuando el humilde equipo Galés del Bangor City visitaba Madrid tras haber perdido en su campo por 0-2. Se trataba de la ya desaparecida Recopa de Europa y la imagen que recuerdo fue la visita a nuestro estadio de unos entusiastas seguidores galeses que disfrutaron de lo lindo del partido (pese a que fue un coñazo) y al portero del Bangor que pa
ró un penalty y se ganó las simpatías de la grada. La siguiente visita desde las islas ya fueron palabras mayores. Fue también en la Recopa (el Atleti era un experto en ganar Copas del Rey) y nos enfrentamos al temible Manchester United, que venía de ganar la edición anterior (1991) y en sus filas contaba con jugadores como Schmeichel, Pallister, Irwin, Ince o Mark Hugues. Con lo que no contaban los del United es que se enfrentaban al mejor Atleti en muchos años con la pareja Schuster-Futre como estrellas y el dúo Vizcaíno-Manolo como escuderos de lujo. El partido fue memorable por parte de Futre y un inconmensurable Tomás Reñones (lo juro!!), el 3-0 final con dos goles del portugues y uno de Manolo dejó casi resuelta la eliminatoria, y en Old Trafford pese a empezar pronto con un gol en contra, Schuster se arregló de enfriar los ánimos ingleses con un empate que supo a victoria. Lo que más recuerdo de ese partido fue el espectacular ambiente que ofrecía la hinchada roja, con miles de seguidores que gritaban enfervorizados con cualquier acercamiento de su equipo, y lo que por entonces me dejó alucinado, coreaban los corners a favor como si fuesen goles, pese a todo Sir Alex Ferguson salió del Calderón con la cabeza gacha. Ya en la temporada 93-94 nos visitó en la Uefa el Hearts escocés, pese a que la eliminatoria parecía fácil, la derrota en Edimburgo por 2-1 hacía que hubiese que remontar, finalmente los goles de Pedro, Manolo y el mexicano Luis García hicieron más fácil la remontada, lo mejor como siempre, la simpatía de la afición escocesa a los que recuerdo intercambiando bufandas con los atléticos. La temporada 97-98 fue la mejor de las últimas 10, antes del descenso y otros descalabros. En la Uefa llegamos a semis y sólo la mala suerte contra el Lazio nos privó de la final, en el camino nos topamos con dos equipos de la zona templada de la Premier, el Leicester City, que dió más guerra en el Calderón que en su campo (2-1 aqui, 0-2 alli) y el Aston Villa de Southgate y Savo Milosevic que nos hizo sufrir tras vencer 1 a 0 de penalty aqui y solo el gol de Caminero en Villa Park nos hizo pasar la ronda. Esta fue la última vez que recuerdo el paso de equipos británicos por nuestro estadio, solo espero que en próximas ocasiones tengamos oportunidad de toparnos con alguno de los grandes de la Premier, de momento el Bolton de Iván Campo será un buen aperitivo.
ró un penalty y se ganó las simpatías de la grada. La siguiente visita desde las islas ya fueron palabras mayores. Fue también en la Recopa (el Atleti era un experto en ganar Copas del Rey) y nos enfrentamos al temible Manchester United, que venía de ganar la edición anterior (1991) y en sus filas contaba con jugadores como Schmeichel, Pallister, Irwin, Ince o Mark Hugues. Con lo que no contaban los del United es que se enfrentaban al mejor Atleti en muchos años con la pareja Schuster-Futre como estrellas y el dúo Vizcaíno-Manolo como escuderos de lujo. El partido fue memorable por parte de Futre y un inconmensurable Tomás Reñones (lo juro!!), el 3-0 final con dos goles del portugues y uno de Manolo dejó casi resuelta la eliminatoria, y en Old Trafford pese a empezar pronto con un gol en contra, Schuster se arregló de enfriar los ánimos ingleses con un empate que supo a victoria. Lo que más recuerdo de ese partido fue el espectacular ambiente que ofrecía la hinchada roja, con miles de seguidores que gritaban enfervorizados con cualquier acercamiento de su equipo, y lo que por entonces me dejó alucinado, coreaban los corners a favor como si fuesen goles, pese a todo Sir Alex Ferguson salió del Calderón con la cabeza gacha. Ya en la temporada 93-94 nos visitó en la Uefa el Hearts escocés, pese a que la eliminatoria parecía fácil, la derrota en Edimburgo por 2-1 hacía que hubiese que remontar, finalmente los goles de Pedro, Manolo y el mexicano Luis García hicieron más fácil la remontada, lo mejor como siempre, la simpatía de la afición escocesa a los que recuerdo intercambiando bufandas con los atléticos. La temporada 97-98 fue la mejor de las últimas 10, antes del descenso y otros descalabros. En la Uefa llegamos a semis y sólo la mala suerte contra el Lazio nos privó de la final, en el camino nos topamos con dos equipos de la zona templada de la Premier, el Leicester City, que dió más guerra en el Calderón que en su campo (2-1 aqui, 0-2 alli) y el Aston Villa de Southgate y Savo Milosevic que nos hizo sufrir tras vencer 1 a 0 de penalty aqui y solo el gol de Caminero en Villa Park nos hizo pasar la ronda. Esta fue la última vez que recuerdo el paso de equipos británicos por nuestro estadio, solo espero que en próximas ocasiones tengamos oportunidad de toparnos con alguno de los grandes de la Premier, de momento el Bolton de Iván Campo será un buen aperitivo.
El resto del equipo más bien parecen retales de la ONU como los ex de la liga española Kapo (el francés del Levante), Nafti (el tunecino del Racing), o los desconocidos Larsson (sueco), Palacios (hondureño), Djorou (nacionalizado suizo), Kelly (irlandés). Los de Steve Bruce (legendario y extraordinario defensa del United en los primeros 90) se llevan un empate que les sabe a gloria en su camino para mantener la permanencia, aprovechándose de uno de los peores días de los reds y que con este tropiezo rompe la 'media inglesa' que les podría llevar este año a conseguir el tan ansiado titulo de liga. Seguro que sirve para que Rafa Benitez reflexione acerca de las rotaciones y no se tome a la ligera partidos en teoría fáciles como el de ayer y que a la postre sirven para que un equipo sea el mejor al final del campeonato, y sino que se lo pregunten a Wenger... Menos mal que aún estamos en la séptima jornada y queda mucho camino por recorrer y muchos partidos de infarto por disputar.
